El Ejecutivo presentó al Congreso su proyecto de ley para que le otorgue facultades legislativas en temas tributarios, fiscales y de reactivación económica.

Según el ministro de Economía, Pedro Francke, quien sustenta y respalda las propuestas, el objetivo del gobierno es “aumentar la recaudación, combatir el incumplimiento tributario y aumentar la progresividad». Con ello, el gobierno recaudaría 12 mil millones de soles más de ingresos tributarios hacia el 2022. Sin embargo, las medidas planteadas se concentran en aumentar impuestos a los mismos contribuyentes (personas y empresas), los formales, que pagan continuamente impuestos. Veamos:

  1. Modificación de la Ley del Impuesto a la Renta (LIR): Esta medida permitiría modificar las tasas que pagan las personas jurídicas (empresas) y personas naturales (trabajadores independientes y en planilla). ¿A cuánto desean aumentar? No se sabe. El gobierno tendría 4 meses para decidir. En la Tabla N°1 se puede observar las escalas de las tasas que pagan las personas naturales de acuerdo a sus ingresos. Las empresas actualmente pagan 29.5% de IR.

Las tasas de impuesto a la renta de 1° y 2 categoría también tendrían cambios. Así, las personas de primera categoría, que tienen ingresos por propiedades que alquilan, también les aumentarán los impuestos por encima del 5%, que es lo que actualmente esta categoría paga.

Las personas de segunda categoría son quienes obtienen rentabilidades de invertir en el mercado bursátil. El sistema bursátil traslada capitales a aquellas empresas que necesitan fondos para mejorar procesos productivos o crear nuevos. Y los mayores inversores son los mismos ciudadanos, dado que las AFP, que administran fondos de jubilación, invierten los aportes a financiar esas empresas. Con esta medida, el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) reduce nuestra rentabilidad futura.

  1. Revisar los costos y gastos que las empresas pueden deducir: Actualmente los costos y gastos que asumen las empresas para operar (en amarillo) reducen el monto por el que te cobrarán impuestos [Ver Tabla N°2]. ¿Qué piensa hacer el MEF? ¿No reconocer gastos que incurre para lograr ventas o no le va a creer los costos de producción que tienen para producir las empresas? En 4 meses se supone que lo sabremos.

  1. Impuestos a negocios digitales: Las empresas no domiciliarias en el Perú no pagan impuestos (ni al consumo, ni a la renta). Por lo que, se busca aplicar IGV a negocios digitales como Netflix, Spotify, Uber,  empresas de aplicación por delivery tales como: Rappi y PedidosYa, entre otros. Sin embargo, el IGV es un impuesto que se le traslada a los consumidores, es decir, los peruanos también cargarían con este impuesto.
  1. Reforma a micro y pequeñas empresas (mypes): Lo rescatable es que a las micro y pequeñas empresas mypes se les dará un nuevo régimen tributario, se modificará el Régimen Único Simplificado (RUS), eliminará el Régimen Especial del Impuesto a la Renta (RER) y el Mype Tributario (RMT).

 

Lo más importante para estas empresas es que puedan emitir factura al dar servicios o bienes a las grandes empresas, que incentive la declaración de costos y gastos por medio de sus deducciones, mediante el empleo de libros y registros contables electrónicos, así como comprobantes de pago electrónico. Al eliminar los diferentes regímenes, accederán, se supone, al flujo formal de la economía, podrán cobrar más y pagar más impuestos.

Como se puede observar, a excepción de la reforma para las mypes, todas las categorías tributarias les suben impuestos a los mismos contribuyentes formales. Esto además de inoportuno va contra la teoría y toda lógica que, ante una recesión, los impuestos aumenten. Va a ir contra la reactivación económica que decían deseaban impulsar.

Tal y como ha sido presentada la propuesta no sería factible que el Congreso le otorgue esta facultad. El Perú es uno de los que menos recauda a nivel mundial debido a la reducida base tributaria, solo 3 de cada 10 peruanos paga impuestos. Es decir, considerando solo a la economía formal la presión tributaria no es de 15% sino del 39.8%[1], una de las cargas tributarias más altas.

El principal objetivo de una reforma debería ser ampliar la base tributaria para sumar más contribuyentes y hacer a la Sunat más eficiente. Sin embargo, estas propuestas no apuntan a ello. Se está buscando asegurar más ingresos al Estado sin plantear reformas que los haga más eficiente en el manejo de los recursos que ya recaudano se puede seguir alimentando un aparato estatal que da malos servicios, no asume responsabilidad y no tiene predisposición a mejorar.


[1] CCL (2012)

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